27 jul 2016

TEXTOS DE JUAN DANIEL OSPINA PINEDA


POLITIQUERIA

El siguiente, es un breve ensayo en el cual hablaremos de política o, más bien, politiquería. Vale aclarar que hay políticos honestos, pero para nadie es un secreto que la mayoría son corruptos.
Colombia ha sido un país muy afectado por esta problemática. A través de los años los políticos, cuando están en campaña, llegan hasta las zonas más afectadas de nuestro país, ya sea por la violencia, por la pobreza o por cualquier otro de los conflictos de nuestra sociedad, a prometerle el cielo y la tierra a las personas, ofreciéndoles empleo, seguridad, mejoras de vivienda y cuanta cosa se les venga en mente, igual a como lo haría el peor criminal, engañan a todo un pueblo y como dice el dicho: “Quedan como los buenos del paseo”.
Sin embargo esto no es lo peor de todo, lo peor de todo es que solo quieren “ayudar’’. En realidad no sabemos cuál es el concepto que tienen de ayudar, si ayudar  al pueblo, ayudar a  sus bolsillos, o ayudar  los dos para no levantar sospechas, pues estos siempre están pensando en ellos mismos  y ven las necesidades del pueblo para aprovecharse de ellas, montan proyectos millonarios en los cuales los políticos se quedan con la mitad del dinero y con la otra mitad hacen cualquier cosita ahí, como quien dice: para que vean que si se está haciendo algo, y al final, con toda tranquilidad se olvidan de todas esas poblaciones afectadas que les brindaron su  apoyo como si nada fuera y a los 4 años vuelven cuando estén en campaña para engañarnos de nuevo, la gente, confía esperando que sea diferente, pero nunca es diferente, siempre roban, y, como son la máxima autoridad del pueblo, nadie ve las injusticas que están camufladas como obras sociales, las cuales, así sean para un beneficio de este, terminan siendo para un beneficio monetario personal.
En conclusión los políticos van a seguir con su politiquería barata hasta el final de sus días, solo esperamos que las nuevas generaciones de gobernantes sean más honestos y menos egoístas.

SIN TITULO

Es un día soleadado igual a muchos, no veo nada diferente, a excepción de de las formas que hacen las nubes. Todo lo demás sigue siendo igual, las casas y edificios están en su lugar, las industrias siguen destruyendo.
Veo pocos árboles y muchísimos automóviles, las personas siguen viviendo reprimidas por el miedo; el miedo a conocerse, el miedo a atreverse  hacer algo nuevo, el miedo a amar, y yo, un humilde y libre pensador no hago más que observar en silencio, igual a como lo haría un búho posado en una rama contemplando la luna.



A LAS ROSAS





Las rosas a veces tienen cuernos
y nos tientan a mirarlas, a percibir su esencia, 
a escuchar su canto de sirenas

Florecen en el mar, en las tumbas
y en los patios donde las colegialas sonríen al sol

A veces también explotan en el silencio o en la luna

Las raíces de las rosas se levantan desde el centro de la tierra
hasta la cúspide del Everest, en los oasis del Sahara,
y en el helado Polo Norte,

Desde cualquier parte del corazón escucho su llamado...

Hay noches que llueven rosas desde el cielo
y se empapan las palabras de rocíos y de pétalos






TEXTOS DE CARLOS TORO



LOCURA Y SOLEDAD  

Llaman a alguien loco sencillamente por expresar sus ideas,
porque sus pensamientos los deja fluir como el agua rodeando un obstáculo
o como la lava ardiente acabando todo a su paso.
Lo llaman loco por no sentir temor a la desolación,
por sentirse con mariposas en el estómago a cada rato,
por sentir que la realidad es su mundo ficticio…

POEMA #2  

Olor a incienso en una desolada habitación, en mi casa, en el campo,
en el bosque. Es el olor de los pinos y los jazmines nocturnos  lo que aspiro.
Decidí caminar en esa noche desolada, viendo a oscuras
podía ver con mis oídos a los animales de la naturaleza,
a los grillos con su sonido constante y seguro, como una tortuga,
a las abejas q de vez en cuando pasaban a mi lado.
Podía ver con mis oídos a lo lejos el aullido de un perro salvaje
podía ver con mis oídos a la lluvia, podía verme con mis oídos a mí mismo…


RECUERDOS  

Tres números —1, 0,0— han sido paran este anciano algo eterno.
Solo puedo morir, qué más puede hacer un viejo.
Recuerdo de todo lo que viví solo un poco, cosas así como:
las mariposas multicolor, los bellos arcoíris hechos de prismas y de luz.
Recuerdo el canto de los pájaros, recuerdo a mi madre haciéndome de comer
con lo poco que había. Recuerdo… no sé… recuerdo… ¡Ah¡ Recuerdo la guerra, recuerdo los incesantes tiroteos en la noche que brillaban con sagacidad, recuerdo a mis compañeros de combate ¡Oh, mis compañeros!
Recuerdo como de sus cuerpos sin un brazo, sin una pierna, o sin extremidades emanaban sangre hasta morir…
Aún no he muerto pero lo haré y tal vez mi muerte sea otro recuerdo…

POEMA #4

Una mariposa negra emana luz blanca, y ahí es donde me pregunto:
¿Cómo una rata blanca emana oscuridad? Ahora pensemos algo más:
si la mariposa y la rata hicieron el amor, ¿cómo fue que pude haber nacido yo?
Contaminé a mis dos madres cuando nací, y a la vez ellas me corrompieron.
Al poco tiempo me conocí con mi abuelo, el científico,
hicimos unos cuantos compuestos y, ¡hurra!, enloqueció.
Ahora somos los mejores amigos, en especial,
por estar en contra de mis madres y también por ellas estar en contra nuestra.