Foto: Rubén Darío Herrera. Pueblorrico, 2016 |
Por Carlos Adolfo Toro Alzate. 10°
“Los límites del alma no se hallarán andando, cualquiera que sea el camino que recorras, tan profundo es su fundamento”. Heráclito.
El alma dentro de cada uno de nosotros es una fuerza interminable y sobre todo incalculable. Esa fuerza extraña con la que algunas veces queremos emprender un camino desconocido sin motivo conciente. Y en ocasiones lo hacemos pero sin darnos cuenta que esa fuerza nos pide andar el camino del alma, pero este camino no nos saciará.
Nuestra alma nos pide algo nuevo, no algo cotidiano, nos pide ir más allá de lo que somos pero no hay que andar para hacerlo. Simplemente es ordenar nuestras ideas y pensar más allá de lo que la sociedad corrompida lo hace. Así, querido lector, solo me queda invitarlos a ir más allá de la cotidianidad física. El alma anda sedienta de conocimiento y nos limitamos a creer saberlo todo cuando no es así.
¿Qué quiere el alma?
Más, mucho más de lo que le damos, algo excelsamente profundo dentro y fuera del cosmos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario